Comprar para reformar

¿Estás pensando en comprar una casa a reformar?

¿No tienes claro que inversiones son rentables?

Si este es tu caso, el artículo de esta semana es perfecto para ti!

Comprar una casa para reformar puede ser muy buena idea, suele ser más barato que comprar una de obra nueva y suelen ser propiedades antiguas, que normalmente no tienen cargas financieras.

Que la vivienda necesite una reforma juega a favor del comprador, que puede conseguir una rebaja. Importante, es muy útil calcular los costes de la reforma antes de negociar, esto le pondrá por delante en la negociación.

¿Pero qué inversiones son realmente rentables? ¿Y cuáles no?

Inversiones que merecen la pena:

El "lavado de cara." Se llama lavado de cara a las pequeñas reformas que mejoran el físico de la vivienda y que no suponen un gran desembolso. Cosas como limpiar, pintar o aligerar de muebles. Nada de esto es muy caro y puede hacer que una vivienda parezca otra.

Mover tabiquería. Derribar un tabique puede parecer una obra complicada y aparatosa pero es una de las reformas con mejor relación calidad precio y que menos complicaciones traerá. Moviendo tabiques podemos conseguir reformas como unir dormitorios o permitir que entre más luz en las estancias.

Restaurar y limpiar los suelos. A veces solo hace falta pasar la fregona bien a fondo para que el suelo de una casa, luzca como se merece. Si la fregona no es suficiente existen muchos tratamientos para suelos que no son muy caros y si con esto sigue sin ser suficiente puedes restaurar los suelos. Con todas las opciones que hay hoy en día esto no será un problema.

Cambiar las ventanas. Cuando compramos viviendas de este tipo nos podemos encontrar con ventanas que no aíslan bien. Si no aíslan, consumen más energía y eso hace que aumente la factura de la luz o del gas. Este problema es fácil de solucionar y no supone grandes costes.

Trabajos exteriores. Las reformas exteriores suelen funcionar muy bien. Con una buena limpieza y plantando unas cuantas flores se consigue que un jardín brille, tenga volumen y parezca nuevo.

Elegir una buena zona. Que la casa esté en una buena zona puede compensar que la casa haya que reformarla, ya que la zona puede convertirse en un punto muy importante a la hora de decidir invertir en una propiedad.

Inversiones que debemos evitar:

Las humedades. Todos conocemos las humedades pero a veces olvidamos lo difícil que es acabar con ellas. Pueden aparecer tanto en los suelos como en la cubierta y si aparece una es muy posible que aparezcan más. Si hablamos de una reparación integral, el coste se dispara. Mejor no toparse con ellas a la hora de reformar.

Cambiar de ubicación el baño o la cocina. Cambiar o mover cualquier parte de la casa es complicado pero si hablamos del baño o la cocina la complicación es mayor. Tanto uno como otro están conectados a unas instalaciones específicas que habría que cambiar o mover y volver a conectar, esto supondrá un gasto adicional.

Los desprendimientos. Hay que tener mucho cuidado con el estado de la estructura antes de invertir. Un desprendimiento puede suponer una derrama sorpresa y poco agradecida. Los costes pueden ser muy elevados.

¡Cuidado con los edificios protegidos! El riesgo en estos casos es mayor porque para la reforma se necesitan materiales específicos que disparan el presupuesto.

Grietas. Si aparece una grieta es que algo no está funcionando bien. Si son superficiales no tienes por qué preocuparte demasiado ya que el arreglo no será muy caro, pero si es un problema de estructura, si tienes razón para asustarte.  Esto supondrá unos gastos muy elevados.

Como habrás visto comprar una casa a reformar puede ser una muy buena inversión. Siempre con cabeza y comprobando primero si existen deudas asociadas a la propiedad, si las instalaciones se adaptan correctamente y calculando, más o menos, cuanto nos costará.

Si no calculamos el coste de la reforma, se nos puede disparar. No queremos sustos y la manera más fácil de evitarlos es contando con un especialista. En Nova estamos para ayudarte!!